Los últimos meses del año traen celebraciones muy hermosas que podemos aprovechar para reflexionar y crecer como familia. El Día de Acción de Gracias presenta una ocasión muy especial para agradecer a Dios por todas las bendiciones que nos da, pero pareciera que la calma y reflexión durasen muy poco, pues al día siguiente nos sentimos bombardeados por “Black Friday” y el inicio de la temporada navideña con las ofertas que no queremos dejar de aprovechar.

Lamentablemente esta abrumadora distracción ya sea por las compras, fiestas en los trabajos, actuaciones en el colegios de los chicos y demás, nos hacen poner poca atención a un tiempo litúrgico muy especial: El Adviento.

El tiempo de Adviento son los 4 domingos antes de la Navidad y cada domingo tiene una reflexión particular. Es un momento de preparación para la llegada especial del niño Jesús. Les compartimos unos consejos prácticos para vivir mas plenamente el Adviento.

Aprovechemos de limpiar la casa
Y no solamente la casa física, sino nuestra morada espiritual, nuestro corazón. Acudamos al sacramento de la confesión, la confesión es renovadora, una forma eficaz de adquirir la gracia necesaria para levantarse y seguir adelante. Con la confesión se nos abre de nuevo las puertas del cielo y por ello después de confesarnos solemos ir en familia a comer unas donuts o un helado para celebrar la maravillosa ocasión de participar nuevamente de la promesa de una vida eterna en presencia del Señor.

Tradiciones Familiares
Decoremos nuestras casas y hagamos una oración especial encendiendo cada domingo una vela más de nuestra corona de Adviento. Aqui te enviamos un enlace con las oraciones. De este modo la espera de los niños por la navidad no es una espera ansiosa por los regalos sino que entiendan que la verdadera espera es la dicha por la visita del Niño Jesus a nuestro hogar. Y no olvidemos las hermosas canciones navideñas con verdadero contenido cristiano, que los niños sepan que el protagonista principal de la navidad no es Santa, sino Jesús.

¿Qué le regalaremos al Niño Jesús?
Estamos tan pendientes a la lista de regalos para la familia, o el intercambio de regalos en la oficina, sin embargo realmente nos ponemos a pensar ¿Cuál podría ser el mejor regalo que le podemos dar a Jesús? Un pequeño sacrificio cada día podría ser muy especial, ya sea ayunando, evitando comer algo especial, o sacrificando algunas horas frente al computador, el teléfono, o los video juegos. Que nuestro tiempo de oración personal y familiar sea más intenso, si tenemos la oportunidad de ir a misa entre semana, o visitar el santísimo unos minutos aprovechémoslo, estos pequeños gestos de aprecio pueden traer un cambio radical en nuestras vidas.

Obras de Caridad en Familia
“La caridad empieza en casa” dice el dicho y tenemos multiples oportunidades de practicar esta virtud en familia, ya sea callando antes de contestar de una manera ofensiva, siendo mas gentiles con cada miembro de la familia, o ayudando en alguna tarea de la casa. Pero también hay formas muy hermosas de servir como familia, ya sea compartiendo algún regalo con alguna institución de caridad, sirviendo comida en un albergue de indigentes, o invitando a alguien que este solo a cenar a casa.

Tiempo de Reflexión y Formación
Aprovechemos de las oportunidades que ofrezca nuestra parroquia para vivir más plenamente el Adviento, partiendo desde asistir a misa y que los niños vean que no sólo en casa se van prendiendo las velas cada semana sino que somos parte de una gran familia espiritual, nuestra comunidad parroquial y la iglesia universal. Para los que tienen acceso a formed.org hay contenido muy valioso sobre el Adviento en inglés y español que podemos aprovechar, desde algún audio o reflexion que podamos escuchar camino al trabajo, o alguna película que podamos compartir en familia.

Preparemos nuestros corazones y esperemos con alegría la llegada de Dios entre nosotros, un niño humilde que no llega como rey, sino que nace en el seno de una familia humilde para redimirnos con su amor incondicional. Que el Adviento sea un tiempo especial de gracia y conversión en todas nuestras familias.

¡Que el Señor los proteja y bendiga en este tiempo especial de Adviento!

Sinceramente,
Jorge & Viviana